Protección contra la corrosión

Soluciones de embalaje
para piezas metálicas

El oxígeno y el agua son vitales para las personas, pero las piezas metálicas necesitan protección contra ambos. No en vano, entre un metal y el oxígeno y la humedad ambientales se produce una reacción química, la corrosión, con el consiguiente deterioro del material. El ejemplo más conocido de la corrosión es la oxidación. Esta aparece cuando el hierro o el acero se oxidan en combinación con los elementos mencionados.

A su vez, la rapidez con que se oxida un componente de metal depende de diversos factores, tales como la temperatura, la humedad del aire o la cantidad de sustancias contaminantes. Pero una cosa es segura: la corrosión tiene lugar de forma permanente y puede provocar daños incluso al cabo de unas pocas horas. Así pues, es importante proteger las piezas metálicas ya durante el proceso de producción, el almacenamiento y el transporte.

Y es aquí donde podemos ayudarle. Con embalajes de plástico protectores contra la corrosión diseñados a su medida, garantizamos que sus componentes expuestos al riesgo de oxidación lleguen a su destino sin merma de su calidad y sus funciones. En nuestras soluciones de embalaje utilizamos tres métodos de protección contra la corrosión: desecantes, VCI e INTERCEPT^®.

Desecantes
La absorción de humedad evita la corrosión

Aplicabilidad universal

Eliminación sencilla

Las bolsas con desecantes, como por ejemplo gel de sílice, se utilizan en la exportación de componentes, entre otras aplicaciones. En este caso, la mercancía transportada se sella mediante una película impermeable al aire y al vapor de agua junto con la cantidad de desencante necesaria y se embala en un embalaje exterior, por ejemplo, un contenedor de transporte. Mientras que la película barrera evita la penetración de humedad, el desecante absorbe la humedad presente en el interior del embalaje. Sin embargo, este tipo de protección contra la corrosión solo funciona mientras el embalaje permanezca herméticamente sellado. Si se abre o se daña la película, se pierde la eficacia y se producirá corrosiónu oxidación.

Aplicabilidad universal: protege tanto piezas metálicas como no metálicas
Las mercancías están inmediatamente listas para el uso tras la retirada de los materiales de embalaje
Es químicamente inocuo y se elimina fácilmente junto con la basura residual

Utilizamos bolsas desecantes especialmente en combinación con otros productos de protección contra la corrosión para, por ejemplo, asegurar la absorción rápida de la humedad inicial en una solución de embalaje.

Protección contra la corrosión Desecantes

Más

VCI
Protección contra la corrosión mediante inhibidores

Alta eficacia

Sustitución sencilla

Sin residuos

Los VCI son inhibidores de la corrosión volátiles (inglés: Volatile Corrosion Inhibitor), que se incorporan a un material de sustrato y con el tiempo se subliman. Dentro de un embalaje cerrado, este proceso crea una atmósfera protectora. Las sustancias activas se depositan sobre la superficie de las piezas metálicas como una capa repelente de la humedad, impidiendo así que se produzca reacción alguna entre el metal y la humedad. Gracias a la liberación sostenida de las sustancias activas, la protección contra la corrosión se restablece incluso después de abrir y cerrar de nuevo un embalaje. Así pues, un embalaje protector contra la corrosión con VCI está indicado para la reutilización y el almacenamiento prolongado.

En virtud de las propiedades descritas, integramos dispensadores de VCI en nuestras soluciones de embalaje. Ya sea en forma de cápsulas o de pastillas, se colocan en posiciones predefinidas en el embalaje. Entre las soluciones implementadas se cuentan, por ejemplo, portadores de carga para culatas o bandejas portapiezas para paquetes de chapas de rotor y estator. La ventaja: los dispensadores poseen un efecto de depósito y liberan las sustancias activas durante un periodo más prolongado. Dependiendo de la cantidad de VCI, las condiciones climáticas y el embalaje exterior, el efecto puede durar desde unos pocos meses hasta varios años. Así pues, es ideal para circuitos de reutilización entre proveedores y fabricantes.

Elevada eficacia y manipulación sencilla
El embalaje no tiene que ser hermético y puede abrirse
Posibilita la sustitución sencilla de los dispensadores
Las sustancias activas se disuelven por completo

Más

INTERCEPT^®
Protección contra la corrosión de alta tecnología para metales y otros materiales

Protección en el material

Efecto prolongado

Reciclable

Intercept^® es una protección contra la corrosión altamente avanzada para piezas metálicas, así como para componentes ópticos y productos de plástico. El material consta de partículas de cobre altamente porosas reticuladas químicamente en un compuesto plástico. Las partículas reaccionan con gases corrosivos presentes en el aire y los retienen de forma permanente. De este modo, se crea en el embalaje una atmósfera neutralizante que protege todas las mercancías que contiene. Incluso se libera de sus componentes corrosivos a la humedad que penetra en un embalaje, lo cual evita que se produzca corrosión. En comparación con otras soluciones de protección contra la corrosión, el efecto de Intercept^®es aún más duradero (hasta 15 años) y funciona incluso en condiciones climáticas extremas. Por consiguiente, el material está especialmente indicado para embalajes reutilizables y embalajes para la exportación.

La aplicación de una fina capa de Intercept^® sobre las placas de plástico (con las que se fabrican nuestros embalajes) nos permite dotar de una protección eficaz contra la corrosión a prácticamente cualquier solución de embalaje. Entre otras mercancías, mediante este método se han embalado ya bloques de motor y componentes de dirección en contenedores de gran capacidad, así como instrumentos de medición en bandejas portapiezas. Una de sus grandes ventajas reside en que no se requieren materiales de embalaje adicionales. También permite prescindir de la sustitución y eliminación periódicas de bolsas o dispensadores. Además, los portadores de carga reutilizables se mantienen lavables sin que se pierda la protección.

Protección contra la corrosiónya incluida en el material de embalaje (plástico)
Actúa incluso a temperaturas extremas (desde -35 °C hasta +80 °C)
No contiene sustancias químicas liberadoras de gas (nitrito, fenoles, etc.)
Respetuoso con el medio ambiente, reciclable y eliminable sin problemas

Protección contra la corrosión Intercept®

Más

Sus ventajas con los embalajes protectores contra la corrosión

En particular las piezas metálicas, pero también componentes de otros materiales, deberían protegerse contra la corrosión durante la fabricación, el almacenamiento y el transporte. Lo ideal es utilizar embalajes protectores contra la corrosión especiales, los cuales impiden que el material reaccione con la humedad y el oxígeno. Además, eliminan la necesidad de aplicar laboriosamente aceite protector o cera en las mercancías y limpiarlas después. A fin de garantizar una protección eficaz contra la corrosión en nuestras soluciones de embalaje, tales como contenedores de transporte y portadores de carga, recurrimos a dos soluciones avanzadas: VCI e Intercept^®. Tanto las sustancias activas VCI como las partículas de cobre del material Intercept^® poseen un efecto prolongado que las convierte en ideales para la reutilización en un circuito de contenedores y embalajes.